La Unión Patriótica del Kurdistán intentó entregar a Sadiq Nikbin a las autoridades iraníes el 17 de agosto. Si fuera devuelto a Irán sufriría graves violaciones de derechos humanos. En la actualidad se encuentra bajo vigilancia en un hospital de Sulaimaniya. Se sabe ya que han sido detenidas otras personas relacionadas con el Partido Comunista Obrero Iraquí (PCOI) y la Organización Independiente de Mujeres (OIM) y que muchas corren grave peligro.