Si los Estados de las Américas realmente quieren ver al continente auténticamente renovado, tienen que buscar soluciones integrales a los problemas históricos y estructurales de la región, centrando sus esfuerzos en la garantía y respeto de los derechos humanos, dijo Amnistía Internacional hoy en una carta abierta a los y las jefes de Estado que asistirán a la 51° Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
“La OEA solo logrará su visión de ‘una América renovada’ si los estados se comprometen a poner los derechos humanos como eje central de toda propuesta para reconstruir la región, luego de las múltiples crisis exacerbadas por la pandemia de Covid-19,” dijo Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
“Urge atender las graves crisis de derechos humanos en la región, poner fin a las tendencias represivas que hemos visto en varios países, y atender las graves falencias estructurales del continente en materia de derechos económicos, sociales y culturales.”
Frente el devastador impacto de la pandemia de Covid-19 en las Américas, Amnistía Internacional insta a los Estados de la región a garantizar el acceso universal a las vacunas; garantizar a toda la población la disponibilidad, accesibilidad, aceptabilidad y calidad de los centros médicos y los medicamentos; y adoptar leyes y políticas para garantizar que las empresas farmacéuticas se ajustan a las normas de derechos humanos.
Urge atender las graves crisis de derechos humanos en la región
Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional
Por otro lado, la organización llama atención a la situación de personas migrantes y refugiadas en necesidad de protección internacional, y las respuestas restrictivas y muchas veces inhumanas de varios Estados del continente. Además, manifiesta su preocupación especial por el mal manejo de la pandemia en Brasil; la represión violenta de protestas en Colombia; y las detenciones arbitrarias de personas identificadas como opositoras al gobierno durante el periodo preelectoral en Nicaragua, como ejemplos del preocupante retroceso en materia de derechos humanos que se enfrenta en la región.
Finalmente, Amnistía Internacional hace un firme llamado a los Estados miembros de la OEA a elegir cuidosamente a quienes conformarán la Comisión Interamericana y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, teniendo presente los principios rectores de transparencia, imparcialidad, idoneidad y la importancia de tener un alto compromiso a favor de las víctimas de violaciones a derechos humanos, sus familias y comunidades.
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