China: La desestimación del recurso de un abogado de derechos humanos pone de manifiesto el temor a la disidencia

En respuesta a la desestimación del recurso interpuesto por el abogado chino de derechos humanos Yu Wensheng contra su condena de tres años de prisión por ‶incitar a la subversión del poder del Estado″, la directora regional adjunta interina del área de Investigación de Amnistía Internacional, Kate Schuetze, ha declarado:

“Los cargos contra Yu Wensheng y su esposa, la activista Xu Yan —declarada culpable del mismo delito—, son completamente infundados y ponen de manifiesto la incapacidad de las autoridades para esgrimir nada que justifique legítimamente su encarcelamiento”.

“El gobierno chino ha utilizado los comentarios de Yu Wensheng en Internet y sus numerosos premios internacionales de derechos humanos como excusa para calificarlo de amenaza a la seguridad nacional. Sin embargo, lo que realmente demuestra esto es el profundo temor de Pekín a los defensores y defensoras de los derechos humanos que se atreven a disentir.”

“Yu Wensheng y Xu Yan se encuentran en prisión sólo por haber ejercido su derecho a la libertad de expresión, y deben quedar en libertad de inmediato y sin condiciones.”

Información complementaria

El 6 de enero de 2025, el Tribunal Popular Intermedio de Suzhou rechazó el recurso presentado por Yu Wensheng contra su condena de tres años de prisión por “incitar a la subversión del poder del Estado”, que le había sido impuesta en juicio el pasado mes de octubre. Su esposa, la activista Xu Yan, fue condenada a un año y nueve meses de cárcel por el mismo delito, y su liberación está prevista para presente mes de enero.

El 13 de abril de 2023, la policía se llevó bajo custodia a esta pareja de activistas, muy conocidos en China, cuando se dirigían a una reunión con la delegación de la Unión Europea en China, que iba a celebrarse en Pekín. Originalmente acusados de “provocar peleas y crear problemas” y recluidos en el Centro de Detención de Shijingshan, en Pekín, en octubre de 2023 fueron acusados de nuevos cargos de “incitar a la subversión del poder del Estado”. En enero de 2024, fueron trasladados al centro de detención de Suzhou (provincia de Jiangsu), a unos 1.000 kilómetros de distancia.

Según informes, Xu Yan ha perdido 14 kilos desde su detención, y las condiciones en que estuvo detenida en Pekín pueden ser constitutivas de tortura u otros malos tratos. La policía la insultó, la intimidó y la amenazó con detener a su hijo si éste emprendía acciones en defensa de la pareja. El muchacho, que acababa de cumplir 18 años cuando la pareja fue detenida, ha sufrido desde entonces un grave deterioro de su salud mental. El traslado de sus progenitores a Suzhou ha agravado su aislamiento.

Yu Wensheng había sido condenado en 2020 a cuatro años de cárcel por “incitar a la subversión del poder del Estado”, debido también, exclusivamente, al ejercicio de su derecho humano a la libertad de expresión. Tras ambas condenas de prisión, la salud de Yu Wensheng se ha deteriorado debido a sus malas condiciones de reclusión y a las torturas y otros malos tratos que, al parecer, ha sufrido a lo largo de su transcurso.

Durante esa primera detención, Xu Yan luchó incansablemente para que su esposo fuera puesto en libertad e intentó numerosas veces —sin éxito— visitarlo en prisión. Xu Yan estuvo sometida a una vigilancia constante y fue acosada reiteradamente por las autoridades chinas, que le enviaron citaciones, la detuvieron y en ocasiones le prohibieron salir de casa.

Yu Wensheng, recibió en 2021 el premio Martin Ennals, galardón anual para defensores y defensoras de los derechos humanos seleccionados por un jurado compuesto por 10 de las principales ONG de derechos humanos del mundo.