Las autoridades saudíes están intensificando su campaña para silenciar todas las voces críticas en el país. Una simple publicación en redes sociales para reclamar reformas en derechos humanos o criticar a las autoridades puede dar lugar a varios decenios de prisión, la prohibición de viajar o incluso la pena de muerte. Mientras, la carísima maquinaria de relaciones publicas de las autoridades vende una imagen de progreso y glamur al mundo, con el fichaje de famosos deportistas y figuras del espectáculo para desviar la atención del atroz historial del país en materia de derechos humanos. Actúa ya y pide a las autoridades saudíes que liberen a todas las personas detenidas indebidamente por ejercer su libertad de expresión.
¿Cuál es el problema?
El 9 de enero de 2024, el Tribunal Supremo de Arabia Saudí condenó a Manahel al Otaibi, instructora de fitness de 30 años, a 11 años de prisión por cargos falsos de terrorismo. ¿Por qué motivo? Por tuitear a favor de los derechos de las mujeres.
Las autoridades saudíes han adoptado una política de tolerancia cero respecto a todo lo que perciben como crítica. Se están imponiendo penas de las más duras que Amnistía Internacional ha documentado hasta ahora en Arabia Saudí por ejercer el derecho a la libertad de expresión, incluidas condenas a varios decenios de cárcel, prohibiciones de viajar y la pena de muerte.
El defensor de los derechos humanos Mohammed al Qahtani continúa encarcelado por su labor de defensa de los derechos humanos a pesar de que cumplió los 10 años de su condena en 2023.
La represión también ha afectado a personas que nunca habían ejercido el activismo político.
Mohammad bin Nasser al Ghamdi, maestro jubilado, fue condenado a muerte por criticar a las autoridades en X, antes Twitter, en una cuenta combinada seguida por sólo 10 personas.
Salma al Shehab, estudiante de Medicina y madre de dos hijos, cumple una condena a 27 años de prisión seguidos de la prohibición de viajar durante 27 años más, por publicaciones en redes sociales en apoyo de los derechos de las mujeres.
Abdulrahman al Sadhan, trabajador humanitario de la Media Luna Roja Internacional, se encuentra actualmente sometido a desaparición forzada y lleva encarcelado desde marzo de 2018. Fue condenado a 20 años de prisión, seguidos de la prohibición de viajar durante 20 años más, por sus tuits satíricos.
A pesar de este nivel de represión manifiesta en Arabia Saudí, el príncipe heredero Mohammad bin Salman está gastando miles de millones de dólares en un impresionante despliegue de humo y espejos para pulir la imagen del país y ocultar la verdad.
¿Cómo puedes ayudar?
Dado que Arabia Saudí continúa engrasando su maquinaria de relaciones públicas, necesitamos amplificar las voces e historias de las personas afectadas por la represión de las autoridades sobre el derecho a la libertad de expresión. Nuestro silencio no está en venta. Actúa ya y pide a las autoridades saudíes que liberen a todas las personas detenidas indebidamente por ejercer su libertad de expresión.
*El contenido de la petición se actualizó el 3 de septiembre de 2024 para reflejar los cambios contextuales más recientes.